Ignacia (Verónica Llinás), es una estrella de otro tiempo que está a punto de salir a escena después de un largo exilio en la televisión. A la edad y la decadencia del cuerpo se suman otros miedos inconfesables.
Quiénes son sus aliados para superar semejante momento? El hijo de su representante de siempre (Esteban Lamothe), que hace lo que puede para estar a la altura y un insólito «coach ontológico» (Héctor Díaz).
Será suficiente ese equipo para hacer frente a la ira de los dioses, cuando las fuerzas inapelables del Destino se manifiesten? El humor lo dirá.
RISAS ASEGURADAS DURANTE 75 MINUTOS.